viernes, 21 de julio de 2017

[165] Los ojos vendados

"Con mi llorar las piedras enternecen
su natural dureza y la quebrantan;
los árboles parecen que se inclinan;
las aves que me escuchan cuando cantan,
con diferente voz se condolecen,
y mi morir cantando me adivinan.
Las fieras que reclinan
su cuerpo fatigado
dejan el sosegado
sueño por escuchar mi llanto triste.
Tú sola contra mí te endureciste,
los ojos aun siquiera no volviendo
a lo que tú hiciste.
Salid sin duelo, lágrimas, corriendo."






"Cuando me desperté, estaba tirada en el suelo. Tenía mucho frío y tiritaba. Tenía los ojos vendados, pero las manos libres. Me quité el vendaje y estaba en el campo. Había una casa, una granja, o algo parecido. Era un amanecer precioso. La luz, la vida... Me quedé ahí sentada en el suelo contemplando aquél paisaje. Sentía el aire fresco en los pulmones y, de pronto, empecé a llorar de felicidad."

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